Hoy, 27 de febrero, se cumplen dos años del megasismo y tsunami que asoló nuestro país, causando muerte, destrucción y despertando sentimientos primitivos que llegó a que nos desconociéramos como sociedad y como país. Quiero proponer un poema de nuestro Premio Nobel Pablo Neruda, en que recuerda uno de estos fenómenos, tan recurrentes en nuestra caprichosa geografía. Que las palabras de nuestro poeta universal sean el mejor homenaje a las víctimas y a sus familias que nunca dejarán de recordarlos, en especial en una noche como esta.
Otra vez, otra vez el caballo iracundo patea el planeta
y escoge la patria delgada, la orilla del páramo andino,
la tierra que dio en su angostura la uva celeste y el cobre absoluto,...
Otra vez, otra vez la herradura en el rostro
de la pobre familia que nace y padece otra vez espanto y la grieta,
el suelo que aparta los pies y divide el volumen del alma
hasta hacerla un pañuelo, un puñado de polvo, un gemido.
Por los muros caídos, el llanto en el triste hospital,
por las calles cubiertas de escombros y miedo,
por el ave que vuela sin árbol y el perro que aúlla sin ojos…
Ay canta guitarra del sur en la lluvia, en el sol lancinante
que lame los robles quemados pintándoles alas,
Ay canta, racimo de selvas, la tierra empapada, los rápidos ríos,
el inabarcable silencio de la primavera mojada,
y que tu canción me devuelva la patria en peligro:
que corran las cuerdas del canto en el viento extranjero
porque mi sangre circula en mi canto si cantas,
si cantas, oh patria terrible, en el centro de los terremotos
porque así necesitas de mí, resurrecta,
porque canta tu boca en mi boca y sólo el amor resucita.
Pablo Neruda
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
¿Quieres comentar esta noticia?