Los escándalos denunciados exigen un “auténtico camino de conversión. Se nos ha hecho patente la iniquidad, la fuerza destructora del mal, nuestra frágil existencia personal y eclesial”, afirma el decano de la Facultad de Teología de la Universidad Católica, Joaquín Silva. Reconoció que las denuncias en contra del sacerdote Fernando Karadima y la declaración de culpabilidad decretada por la Congregación para la Doctrina de la Fe “han golpeado a la Iglesia chilena en general”.
Para acceder al periódico, haga click aquí.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
¿Quieres comentar esta noticia?